S I L V I A   R Ü H L

E L   T A L E N T O   M Á S   G R A N D E   D E L   G I T A N O

E R A   E L   D E   L A   A M I S T A D


p o r   M i g u e l   M o r e n o   D u h a m e l

 

 

 

 

Silvia Rühl es antropóloga y profesora de idiomas. Actualmente es directora de la Corporación Cultural Chileno Alemana de Valparaíso, o "el Goethe" como la conocemos acá. Ha trabajado en la enseñanza de idiomas en Alemania, Italia y Chile.  A principios de la década de 1980 conoció a Osvaldo "Gitano" Rodríguez con quien más tarde contrajo matrimonio.  Hoy es una de las responsables de mantener el legado cultural de este artista porteño.  Realizamos esta entrevista sumergidos en el universo virtual de los correos electrónicos.

 

Silvia, cuéntanos primero de cuál es tu relación con Chile (cuando llegaste a este país, sobre tu familia, tu padre, etc.)

 

Llegué por primera vez a Chile con 8 años, porque mi padre fue él que trajo el Goethe Institut a Chile (Santiago) a mediados de los años 50; vivimos aquí 8 años, lo que me marcó.

 

¿Cuál es tu función actual en la Corporación Cultural Chileno-Alemana y qué actividades están desarrollando allí?

 

La Corporación se fundó en 2012, apoyada por el Goethe Institut Santiago, para seguir la tradición del "Goethe" en la V Región. La "re-inventé" y dirigí durante los pasados años, ahora me estoy retirando paulatinamente para tener más energías para la futura fundación Osvaldo "Gitano" Rodríguez.

 


 

 

 

Háblanos un poco de la fundación que estás formando para salvaguardar y difundir la obra del Gitano Rodríguez.

 

Cuando regresé a Chile en el 2003 lo hice justamente para dar un destino a la obra de Osvaldo que tiene que tener su lugar aquí, en Valparaíso. Él ha dejado un importante legado que no ha sido publicado o que está en ediciones que prácticamente ya no se encuentran. Así, el pasado año se publicó una novela, "El día que me quieras" en Ediciones Altazor; este año se reeditará en la Ed. Hueders el libro "Cantores que reflexionan" gracias a la iniciativa de Marisol García; está prevista también la reedición de su tesis de doctorado "La Nueva Canción Chilena. Continuidad y reflejo", premio Casa de las Américas, por esta misma institución y varias otras a más largo plazo. Pienso que – a veinte años de su muerte – Osvaldo todavía tiene bastante que decirnos.

 

Conocemos al Gitano Rodríguez por su música.  Háblanos un poco sobre el “Gitano” escritor y artista visual.

 

Bueno, de su obra como escritor y ensayista acabo de hablar. También hay muchos escritos suyos en la revista "Araucaria", reseñas, cuentos poesía, también dibujos. Hay poesía (parcialmente editada) y luego poesía transformada en dibujos, disciplina que – después de sus estudios en "Bellas Artes" de Viña del Mar en los años 60 -  retomó alrededor del ’85. Hay una serie de gouaches/acuarelas sobre la bahía de Valparaíso, de las que desgraciadamente conservo sólo una, las otras en fotos, luego viene la serie más conocida de él, el "Drenaje total de la Bahía de Valparaíso", donde surge la "Casa Transparente" y con ella los "sueños de su Habitante"; estos sueños están comentados en el dibujo, o sea, es una unión de la palabra con el elemento visual. Cuando vivimos en Chile en 1993/94 estuvo enfermo un tiempo prolongado y allí surge la serie "Ventanas sobre Valparaíso" que es más abstracta. También hay dibujos que giran en torno a los ascensores, o sea, siempre Valparaíso, su obsesión,

 

Y del artista al humano. ¿Cómo era el Gitano Rodríguez en el diario vivir?

 

Muy centrado en lo que hacía, intenso, por lo general la pasábamos muy bien y nos matábamos de la risa (obviamente también peleábamos); los 15 años que vivimos juntos fueron de un intenso intercambio en torno a su creación, sobre todo los años después de que yo terminara mi contrato en la Universidad de Göttingen, Alemania, y cuando decidimos radicarnos en Italia estando los dos cesantes y, por lo tanto, con mucho tiempo para la creación. Ese es el tiempo en que redactó su trabajo científico para la Universidad de Praga con la que en 1986 recibe el título de doctor en letras. Además hay poesía y una cantidad de cuentos aún sin publicar.

 

 

 

 

 

 


 

 

 

 

¿Puedes hablarnos sobre dónde sorprendió el golpe militar del ’73 al Gitano Rodríguez y qué ocurrió con él entonces?

 

Obviamente aquí puedo reproducir sólo lo que él contaba: Había vuelto poco antes de una estadía prolongada en Francia, donde había hecho un trabajo para la Unesco, pasando por Cuba. No se había vuelto a integrar nuevamente a la Universidad (de Chile) – por lo que nunca pudo hacer valer sus derechos como exonerado – y vivía en casa de su madre en el Cerro Artillería/Playa Ancha. Estuvo varios días clandestino en Viña y Valparaíso hasta que se encontró casualmente en la calle con un ex-compañero  de colegio (perteneciente a "Patria y Libertad") que lo llevó en auto a Santiago. Allí pudo quedar algunos días en casa de unos queridos amigos hasta que pudo refugiarse en la Embajada de Argentina. Después de un tiempo relativamente largo salió a Buenos Aires y más tarde a la República Democrática Alemana. Esto obviamente está lleno de muchos detalles más, que sería demasiado largo detallar aquí, pero que están reflejados en un cuento, además en sus diarios.

 

Cuéntanos de la amistad con otros personajes, como por ejemplo de Martín "Poni" Micharvegas o el Payo Grondona  (son sólo ejemplos, puedes referirte a quien quieras)

 

A parte de los talentos mencionados, creo que el talento más grande del Gitano era el de la amistad. Tenía muchos amigos, repartidos por el todo el mundo (cuando estábamos de gira o viajábamos por otros países siempre estábamos alojados en casa de amigos). Cuando llegaba, p. ej., a París convocaba a gente que vivía allí y no se encontraba en mucho tiempo, pese a vivir en la misma ciudad, etc. Esto se reflejaba, además, en una intensa correspondencia con medio mundo, que está conservada – con copia de lo que él escribía – y que llena 13 archivadores, lo que algún día será publicado en una edición crítica. Por eso es difícil – mejor dicho largo – hablar de este tema porque habría que mencionar a muchas personas. Obviamente sobresalen algunos, entre ellos el Poni, con quien mantuvo amistad desde que Poni llegó por primera vez a Chile, a comienzos de los 70, hasta la muerte del Gitano, todo esto documentado con una nutrida correspondencia que sería objeto de la primera edición anotada de los mencionados volúmenes de correspondencia.

 

Con Payo se conocían desde niños/adolescentes, siendo del mismo barrio, luego el trabajo conjunto en las Peñas, etc., y eran muy cercanos respecto a una cierta irreverencia frente a "vacas sagradas" que en Payo estaba presente también en sus expresiones en público, en cambio en el Gitano se manifestaba más en un ambiente privado (tiene una colección de "canciones en joda" de canciones conocidas, entre ellas su propio "Valparaíso" que son testimonio de esta especie de humor negro que servía para alivianar la amargura). En fin, ir a fondo aquí sería largo; cabe mencionar que la gente o lo amaba o lo detestaba (y de ello también hay testimonio), creo que por su intensidad no dejaba lugar a medias cosas.

 

¿Qué ocurrió a su regreso a Chile? ¿Por qué decidieron volver a Europa?

 

Cuando por fin Osvaldo podía regresar a Chile, encontramos primero una fórmula que fue perfecta: en aquellos años la base de nuestra existencia era el trabajo de temporada que yo ejercía en un hotel en el lago en el norte de Italia donde estábamos radicados. Ese trabajo terminaba en octubre/noviembre y volvía a comenzar en marzo/abril, por lo que en ese período de cesantía de temporada mío viajábamos a Chile, donde Osvaldo tenía posibilidades de trabajo. Esa rutina se interrumpió con el nacimiento de nuestra hija Eleonora en enero del 91, con lo que viajamos nuevamente a Chile recién en el 93 (Osvaldo fue invitado como jurado para el Festival de Viña del Mar). Lo que fue pensado como viaje terminó en una estadía más definitiva y al comienzo se proyectaba muy bien, porque se suponía que Osvaldo iba a tener trabajo en una universidad y yo me iba a dedicar a ser dueña de casa y madre, por lo menos mientras nuestra hija estaba pequeña. Después de muchos intentos, promesas, desilusiones y fracasos y después de una noche de evaluación y cálculos del costo de vida en Chile y en Italia  (sobre todo teniendo en cuenta el costo de educación, salud y seguro social en Chile) llegamos a la conclusión de que era mejor volver a nuestra casa en Italia, donde, además, yo no tenía problemas de volver al trabajo en hotelería que había ejercido antes y con lo que eso implicaba a nivel de seguridad social. (Fue una decisión muy sabia en vista de lo que poco tiempo después se nos vino encima a nivel de problemas de salud, no sólo del Gitano.) Aun tengo el recuerdo del amanecer sobre la Bahía de Valparaíso después de esa larga y tan decisiva noche.

 

 

 

 

 

 


 

 

 

 

 ¿Cómo evalúas o crees que es visto en la actualidad la figura y obra de Osvaldo Gitano Rodríguez, tanto dentro como fuera de Chile?

 

Por motivos obvios, en la actualidad al Gitano no se le conoce mucho fuera de Chile. Cuando estaba vivo eso era diferente, porque se movía mucho, también a nivel académico, y tenía ese intenso intercambio epistolar ya mencionado. Sin embargo, pienso que, dentro y fuera de Chile, tanto él como el Payo, nunca tuvieron el lugar que tal vez les correspondía dentro del movimiento de la Nueva Canción Chilena por ser porfiadamente regionalistas. En el caso de Osvaldo se le agrega que incursionaba en varias disciplinas con la consecuencia que – los que incursionaban en una sola – no lo tomaban demasiado en serio en la propia porque "también era esto, o lo otro…" Los académicos igual. Y puede que todos tengan razón, que tal vez no era sobresaliente en ninguna de las disciplinas, pero su valor, para mí, consiste en justamente en eso, además centrado en la ciudad de Valparaíso. Y pienso que Valparaíso en algún momento tiene que reconocer en forma menos fútil la proyección que Osvaldo le dio. Por eso estamos proyectando algo en grande para el año próximo, cuando se cumplen los 20 años de su muerte (…. Y, como dice el tango, "… veinte años no es nada…").

 

Tienes tribuna libre para decir lo que quieras o no, como desees.

 

Lo primero que haremos ahora es tener una forma jurídica para acoger los archivos y proyectar así públicamente su obra. Luego estamos proyectando un evento grande y largo para el próximo año, desde marzo (su defunción) hasta julio (su cumpleaños) dedicando un mes a cada una de las disciplinas en las que se articuló. En detalle informaremos sobre estos eventos en su Facebook:


El "Gitano" Rodríguez
https://www.facebook.com/pages/El-Gitano-Rodr%C3%ADguez/335811559822903

 

Y también en su página web : www.elgitano.cl